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Taxonomía y situación de las fotografías
Especie: Focha común (Esp.), Common Coot, Eurasian Coot (Eng.), Fulica atra.
Filum: Chordata. Clase: Aves.
Orden: Gruiformes. Familia: Rallidae.
Grupos: Aves, fochas.
Situción: 16 de marzo y 19 de mayo de 2019, en el paraje Natural Municipal del Clot de Galvany, Elche, Alicante, España.
Algo sobre la focha común
La focha común es una especie tan común y abundante que es difícil no observarla en cualquier humedal. Además, su aspecto es tan propio que no cabe confusión con otra especie. Salvo, eso sí, que se encuentre por allí algún ejemplar de la muy escasa focha moruna. Ahora bien, no por ser tan ubicua deja de ser una especie interesante … y fotogénica.
Amplia distribución por esos mundos
La focha común es una especie de amplia distribución, que se encuentra en Eurasia, salvo en el norte en las zonas más frías; en el norte de África y en la región australiana. Es una especie residente en gran parte de su distribución, aunque las poblaciones que se reproducen más al norte son migratorias.
En la Península Ibérica es una especie sedentaria que se encuentra distribuida por todo el territorio en los humedales costeros y del interior. Los ejemplares residentes, no obstante, pueden realizar movimientos dispersivos postnupciales, o como consecuencia de circunstancias ambientales adversas, como la disminución de los recursos hídricos en un determinado lugar. También se encuentra en las islas Baleares, Canarias, Azores, y más recientemente en Madeira.
Se reconocen 4 subespecies siendo la nominal (Fulica atra atra) la de mayor distribución con diferencia, que incluye a la Península Ibérica y las islas antes mencionadas. Esta subespecie tiene una talla de 36-39 cm, los machos pesan en promedio 902 g (610-1200 g) y las hembras 770 g (610-1150).
En todo tipo de humedales pero con la vegetación adecuada
Habita en una gran diversidad de humedales naturales y artificiales, de agua dulce y salobres; prefiere masas de agua grandes, abiertas, tranquilas, y de poca profundidad. Ahora bien, en general requiere la existencia de vegetación sumergida de la que se alimenta principalmente; así como de vegetación palustre densa en las orillas, al objeto de ocultarse y nidificar.
Normalmente se encuentra entre el nivel del mar y los 1000 m, como en Europa. No obstante, también alcanza los 2000 m en Tayikistán e Irán, 2500 m en Cachemira; e, incluso, los 3500 m en Nueva Guinea, donde habita en lagos de montaña.
Aunque es una especie omnívora, su dieta es principalmente vegetariana. Así se alimenta de algas; semillas, brotes y tallos de plantas acuáticas sumergidas; tallos y rizomas de juncos, carrizos y eneas. Esta dieta la completa con invertebrados, tales como moluscos, gusanos, artrópodos, larvas y adultos de insectos; incluso, también, pequeños vertebrados.
Es una especie de hábitos diurnos, pero a menudo está activa en las noches de luna. Usualmente busca el alimento sumergiendo parte de su cuerpo en aguas someras, y buceando en las más profundas; también, en la superficie, o ingiere fragmentos vegetales a la deriva. No obstante, puede pastar ocasionalmente en tierra, aunque siempre cerca del agua.
No le gusta volar pero sí el “corre/vuela”
Es una especie que aunque puede volar largas distancias en las migraciones, tiene un vuelo pesado y suele permanecer en el agua la mayor parte del tiempo. En este medio se desenvuelve muy bien y con un estilo muy propio. Como indica Pérez Mellado (1975): “los movimientos natatorios normales en aguas tranquilas van acompañados de balanceo rítmico de cabeza y cuello sincronizados con los de las patas”.
Realmente es muy difícil observar a la focha común volando. Sin embargo, sí es fácil verla en ese espectacular “corre/vuela”; término este utilizado por el autor anterior. Tanto cuando ataca, como cuando se siente en peligro, corre literalmente chapoteando sobre la superficie del agua impulsada por un vigoroso batir de alas, y ayudada por la morfología lobular de sus largos dedos. En estos casos simplemente se desplaza unos cien o doscientos metros pero, por lo general, no llega a alzar el vuelo.
Sus patas robustas de color verde presentan unos grandes y largos dedos lobulados. Esta adaptación supone una mayor superficie lo que los hace más eficiente en la natación, pero también para impulsarse sobre la superficie del agua en su característico “corre/vuela”. Asimismo, esos largos dedos le deben ser útiles para caminar sobre la vegetación palustre, tal y como es el caso del calamón común.
Galería fotográfica de la focha común
Saludos flamencos,
Bibliografía
Perez Mellado, V. 1975. Sobre la etología invernal de Fulica atra L. Ardeola, 21:325-346. (disponible el 2 de junio de 2020 en https://www.ardeola.org/uploads/articles/docs/1072.pdf)
SEOBirdlife. 2008. Enciclopedia de las Aves de España. Focha común (Fulica atra). SEOBirdlife, Fundación BBVA. (disponible el 2 de junio de 2020 en https://www.seo.org/ave/focha-comun/)
Svensson, L., Mullarney, K., Zetterströn, D. 2001. Guía de aves. España, Europa y región Mediterránea. Segunda edición. Ediciones Omega, Barcelona.
Taylor, B., Kirwan, G.M. 2020. Eurasian Coot (Fulica atra), version 1.0. In Birds of the World (J. del Hoyo, A. Elliott, J. Sargatal, D. A. Christie, and E. de Juana, Editors). Cornell Lab of Ornithology, Ithaca, NY, USA. (disponible el 2 de junio de 2020 en https://doi.org/10.2173/bow.eurcoo.01).
